Existe información contradictoria sobre si las focas están en peligro de extinción o no, la realidad es que algunas especies lo están, mientras que otras, como la foca gris, siguen aumentando en número. Por lo tanto, los esfuerzos de conservación deben centrarse en ayudar a aquellos que son más vulnerables debido a la escasez, aunque las investigaciones muestran que, el hábitat natural de todas las focas sigue siendo destruido.
Cuando se tiene en cuanta la caza, la falta de alimentos debido a la pesca excesiva y la contaminación, las amenazas que afectan a todas las focas son reales y alarmantes. Existe una buena probabilidad de que en muchos de estos animales se vea una reducción en sus números para la próxima década. Dado que las focas sólo tienen una cría cada año y, aproximadamente el 15% no sobrevive a la madurez, hace que con números muy bajos, sea extremadamente difícil volver a levantarse.
Por ello, los esfuerzos de conservación deben estar en su lugar ahora. Al proteger las focas y hacer cambios ahora, no tendremos que esperar hasta que los números sea drásticamente bajos. Una especie de foca que realmente necesita ayuda es la foca monje del Mediterráneo, en peligro de extinción en este momento. Esta especie vive a lo largo de la costa de África, se cree que menos de 500 de ellos sobreviven hoy.
Más de 2/3 de estas focas fueron eliminados en 1997 debido a un tipo de virus. Desde entonces se hacen esfuerzos para protegerlos, y los números están subiendo lentamente. Otra amenaza son los seres humanos que viven cerca. Se sabe que cazan a estas focas por su carne, a pesar de que están protegidos, estas personas son tan pobres que harán lo que sea con el fin de sobrevivir.
Una manera en que los esfuerzos de conservación han ayudado a las focas es mediante la creación de un área marina de para focas. De esta manera tienen un suministro adecuado de alimentos y al mismo tiempo, esta fuente de comida puede ayudar a las personas que viven en la zona. De esa manera ya no se sienten forzados a consumir la carne de estas focas.
La Sociedad para la Conservación de la Foca sigue desempeñando un papel fundamental en ayudar a las focas a permanecer en la Tierra. Se trata de una organización sin fines de lucro que existe desde 1996. Su objetivo es ofrecer medios eficaces para proteger a las focas en todo el mundo, continúan monitoreando a las focas para identificar sus números actuales y se ponen en contacto con figuras políticas para presionar por una mayor protección de las focas.
Trabajan en estrecha colaboración con otros grupos de derechos de animales, entienden que tienen un el apoyo de estas organizaciones y lo usan para su beneficio. La Sociedad para la Conservación de la Foca se esfuerza por ofrecer materiales educativos para las escuelas pues, desean promover sentimientos positivos hacia las focas en las generaciones más jóvenes, con la esperanza de que serán más compasivos hacia ellos desde una edad temprana.
La investigación ha demostrado que la exposición a derrames de petróleo es un gran problema para las focas. Mantenerlas fuera del petróleo es algo que los voluntarios hacen como forma de conservación. Mientras que la limpieza se lleva a cabo, las focas son temporalmente colocados en una nueva ubicación, sin embargo, aquí no es donde terminan los riesgos, estas focas también pueden sufrir problemas de respiración, del oído, e incluso con su garganta.
Existen otros elementos que ponen en peligro la vida de las focas, parecen ser susceptibles a variedad de enfermedades, incluyendo parásitos. La contaminación que los seres humanos continuamos colocando en el aire y en el agua también afecta su vida natural. Cuando las focas están en las mismas aguas que los pescadores, las redes pueden lesionar o matar a los que se enredan en ellas, muchas focas también se ven perjudicadas debido a acercarse demasiado a los barcos que se encuentran en las aguas.